Resulta incómodo, nos da pudor e incluso genera falta de autoestima si sabemos que tenemos mal aliento, ¿verdad? Incluso afecta a nuestras relaciones personales porque es tan molesto tanto para el que lo sufre como para los que están a su alrededor. Por eso queremos que conozcas cuáles son las causas del mal aliento y cómo puedes evitarlo:
Tipos de halitosis y causas del mal aliento
En primer lugar, debemos distinguir entre la halitosis transitoria o pasajera, que es la que ocurre cuando no comemos en varias horas, cuando nos ponemos nerviosos, estamos estresados o al despertarnos.
Por otro lado, existe el mal aliento permanente que puede ser sinónimo de una enfermedad.
Una vez que lo tenemos claro, repasamos los motivos más comunes, pero no los únicos, por los que podemos tener mal aliento:
- Infecciones en la boca como las caries o enfermedades periodontales como la gingivitis.
- Tener la boca seca o xerostomía.
- Enfermedades digestivas o problemas gastrointestinales.
- Diabetes.
- Patologías en el sistema respiratorio o insuficiencia hepática renal, entre otros.
- Respirar por la boca.
- Hábitos poco saludables (tabaco, alcohol, etc.).
- Comidas que causan halitosis como el ajo o la cebolla.
- Infección sinusal que incluye dolor de garganta y goteo nasal y que convierte la garganta en el hogar ideal de las bacterias.
- Algunos fármacos o medicamentos también pueden causar mal aliento.
Cómo combatir la halitosis o mal aliento
Como hemos visto, el primer paso es aclarar el origen de la halitosis en la consulta del dentista que realizará un diagnóstico y, a partir de ahí, actuar. No obstante, algunas posibles soluciones serían:
- Tratamientos odontológicos específicos.
- Higiene bucodental adecuada de acuerdo a las pautas específicas que marque el odontólogo.
- Si llevamos prótesis también deben limpiarse una vez al día.
- Dejar de fumar o beber alcohol, es decir, llevar una vida sana.
- Hidratarse con agua para generar más saliva.
- Aprender a respirar por la nariz y la boca para que la respiración no afecte a la composición bacteriana de la saliva.
- Evitar alimentos que causen mal aliento como los ya mencionados.
- Cepillar los dientes después de comer y no olvidar la lengua.
- Completar el “ritual” de higiene y limpieza bucal con hilo dental y enjuague.
- Tomar verduras frescas y con fibra que ayuden a limpiar los dientes, como por ejemplo las zanahorias.
¿No estás seguro de la causa de tu mal aliento? Ven a nuestra consulta donde llevamos más de 30 años ayudando a pacientes con este y otros problemas. Juntos te enseñaremos a combatir la halitosis.