Tanto si las piezas dentales son definitivas como si son de leche, la importancia de prevenir la caries dental en niños es igual de importante. De hecho, es un error pensar que sólo debemos preocuparnos de los dientes permanentes ya que los de leche influyen en los que saldrán después. Por eso, si las caries no se han tratado correctamente pueden aparecer manchas, lesiones o incluso malformaciones. Sigue estos consejos para evitar las caries:
¿Cómo prevenir las caries en los niños?
Para prevenir esta enfermedad infecciosa que causan las bacterias de la boca y que destruye los tejidos minerales del diente debemos:
- Visitar al odontopediatra para detectar los primeros síntomas. De hecho, como no es hasta que pasan meses cuando es visible por los padres y, a veces, tampoco no produce molestias, será un examen médico el que descarte la existencia de caries.
- Cuidar la salud bucodental desde que los niños son bebés para evitar consecuencias negativas en el futuro. Recuerda que la tetina de los biberones no debe estar en contacto con su boca durante más de 20 minutos y menos aún dejarlo durmiendo la siesta o por la noche. ¿La razón? Mientras dormimos la salivación que limpia y remineraliza es menor y la boca se convierte en un hábitat perfecto para que se desarrollen las caries.
- Adquirir el hábito de cepillar los dientes para eliminar la placa dental. Cuando son bebés usamos una gasita húmeda. Más tarde, desde el primer diente de leche, pasamos a cepillarlos después de cada comida. El papel de los padres es fundamental por dos motivos: tienen que supervisar a los pequeños hasta los ocho años más o menos y, por otro lado, como adultos, si nos cepillamos los dientes delante de los niños será un hábito que estos querrán imitar.
- Flúor. En línea con el consejo anterior, hay que apostar por pastas dentífricas fluoradas siguiendo las pautas establecidas por el odontólogo.
- Sacarosa, lactosa y fructosa, ¡evítalas! Como dicta la sabiduría popular, el azúcar tiene la mayor parte de la culpa. En este aspecto los alimentos que los niños no deberían tomar con frecuencia son: dulces, chucherías, galletas, tartas, bollería industrial, pasteles, refrescos, zumos envasados, chocolate y patatas fritas, por citar unos ejemplos.
- ¿Se contagia? Al tratarse de un proceso en el que podemos contagiar las bacterias que provocan las caries debemos vigilar a los pequeños para que no compartan los cubiertos, mordedores o sus chupetes, por ejemplo.
- Picar entre horas, no gracias. Si los niños toman alimentos poco saludables entre horas y no se lavan los dientes los ácidos atacan con más facilidad y las caries aparecen.
- Dieta equilibrada y sana. Como hemos avanzado, la alimentación es clave. Un exceso de harinas en forma de pizza, pasta o pan, por ejemplo, también se metabolizan y producen azúcares. Al contrario, frutas, verduras y hortalizas como manzanas o zanahorias o alimentos ricos en fibra como pan integral son beneficios para la salud oral.
Ya sabes cómo prevenir las caries en los niños así que da el primer paso y llámanos para empezar a cuidar la salud bucodental de los pequeños de la casa.